En la economía mexicana el presupuesto del primer año de
cada sexenio suele ser de temerse, el del 2013 no será la excepción.
Sucede algo muy curioso en México, el tiempo que hay entre
que las elecciones se declaran oficiales y el presidente toma el cargo es de
los más prolongados del mundo, unos cinco meses. Pero el tiempo del que
dispondrá el nuevo congreso para aprobar un presupuesto es de tan sólo 15 días,
precisamente éste se debe entregar a más tardar el 15 de Diciembre.
Y bueno, según eso la Administración que va de salida cuenta
con anteproyecto para el presupuesto del próximo año, pero no son definitivos,
y ante el cambio de poderes y de intereses, en pocos casos llega a servir de
algo.
De acuerdo al artículo 74 de la Constitución, y al artículo 43
de la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, se debe de garantizar la
transición sin que haya problemas o contra tiempos.
Lo bueno
Al menos ya se conoce a uno de los personajes que tendrá que
ver con la transición, se trata de Luis Videgaray quien estará a cargo de
políticas públicas. Aún no se ha definido que alcance tendrá su posición, pero
si se quieren tomar las cosas en serio, sería bueno que empezaran a darle
forma cualquiera que vaya a ser el
proyecto.
Lo malo
¿Recuerda el error de Diciembre? Entre todas las torpezas
que se cometieron, también fue un mal cambio de poder, con una mala
administración que terminó por develar cuan estancada se encontraba la economía
mexicana.
0 comentarios:
Publicar un comentario